🌟 R͙e͙c͙o͙r͙d͙a͙m͙o͙s͙ e͙l͙ c͙u͙m͙p͙l͙e͙a͙ño͙s͙ d͙e͙ 🌟 Audrey Hepburn
Audrey Kathleen Ruston, nacida el 4 de mayo de 1929 en Bruselas, es más conocida por su nombre artístico: Audrey Hepburn. Esta icónica actriz dejó una huella imborrable en la historia del cine y la moda.
Icono del Cine clásico y defensora de la elegancia
Fue una figura multifacética en la industria del entretenimiento. Originaria de Ixelles/Elsene, un municipio de Bruselas (Bélgica), su legado trasciende las fronteras y se entrelaza con la época dorada de Hollywood.
Como actriz, modelo, bailarina y activista, Hepburn dejó una huella imborrable. El American Film Institute la considera la tercera mayor leyenda femenina del cine estadounidense, y su elegancia innata la llevó a formar parte del International Best Dressed List Hall of Fame.
La vida de Hepburn estuvo marcada por cambios y desafíos. En 1939, se trasladó con su madre y sus dos medio hermanos maternos a la casa de su abuelo en Arnhem, Países Bajos. Allí, su pasión por el arte y la cultura floreció, preparándola para un futuro lleno de luces y cámaras.
A lo largo de su vida, Hepburn se casó dos veces y tuvo dos hijos. En 1970, nació su segundo hijo, y la familia se estableció en Roma. Sin embargo, en 1982, su matrimonio con Andrea Dotti llegó a su fin debido a sus numerosas infidelidades.
Pero es en la pantalla grande donde Audrey Hepburn dejó una huella imborrable. Su papel en la película “Sabrina” la convirtió en un mito de Pigmalión, personificando la promesa de que cualquier mujer podría transformarse en una versión mejorada de sí misma. Su elegancia, su mirada profunda y su gracia natural la inmortalizaron como un ícono del cine clásico.
Así,sigue siendo recordada no solo por su talento actoral, sino también por su compromiso con causas humanitarias y su legado como defensora de la elegancia atemporal.
Una estrella con corazón humanitario
Fue mucho más que una actriz, modelo, bailarina y activista británica de la época dorada de Hollywood. Su compromiso con causas humanitarias la convirtió en una figura inspiradora que trascendió el mundo del espectáculo.
La historia de UNICEF a través de la mirada de Audrey Hepburn, Embajadora de Buena Voluntad
Dedicó gran parte de su vida a trabajar con UNICEF, la agencia de las Naciones Unidas para la infancia. Como Embajadora de Buena Voluntad desde 1988, viajó por todo el mundo para dar visibilidad a la difícil situación de los niños en países en desarrollo. Visitó proyectos de vacunación, programas de capacitación para mujeres, iniciativas para niños que viven en la calle, proyectos de agua potable y programas de alfabetización.
Su activismo no se limitó a los viajes. Hepburn también testificó ante el Congreso de los Estados Unidos, participó en la Cumbre Mundial para la Infancia, lanzó los informes del Estado Mundial de la Infancia de UNICEF, presentó ceremonias de premios, diseñó tarjetas para recaudar fondos, participó en giras de conciertos benéficos y dio numerosos discursos y entrevistas promoviendo el trabajo de UNICEF. En 1992, recibió la Medalla Presidencial de la Libertad, el más alto honor civil de los Estados Unidos.
Incluso durante su lucha contra el cáncer, Audrey continuó su trabajo para UNICEF, viajando incansablemente hasta su fallecimiento en 1993.
Su compromiso con causas humanitarias y su legado como defensora de los derechos de los niños continúan inspirando a muchas personas en todo el mundo.
Además de su trabajo con UNICEF, también ayudó a la Resistencia holandesa durante la Segunda Guerra Mundial. A pesar de sufrir síntomas de desnutrición, realizó actuaciones de baile clandestinas para recaudar fondos para la Resistencia.
Su historia nos recuerda que las estrellas de cine pueden ser mucho más que figuras de la pantalla. Pueden ser agentes de cambio, defensores de causas justas y ejemplos de valentía y compasión. Audrey Hepburn fue todo eso y más.
Hablemos de Cine
Hepburn es una de las pocas personas que han ganado un Óscar, un Emmy, un Grammy y un Tony, así como la primera actriz en ganar un Óscar, un Globo de Oro y un premio BAFTA por una sola actuación
Hepburn es una de las pocas personas que han ganado un Óscar, un Emmy, un Grammy y un Tony, así como la primera actriz en ganar un Óscar, un Globo de Oro y un premio BAFTA por una sola actuación.
Una de las actrices más aclamadas del cine en los años 60, se convirtió en un ícono de estilo. Comenzó su carrera interpretando roles pequeños en varias películas y trabajando como corista en algunos teatros. La actuación en la obra de teatro Gigi fue muy elogiada por los críticos, y el New York Times declaró que ella fue el gran éxito de la noche.
Aunque tuvo éxito en el musical, fue su papel en la película Roman Holiday (1953) el que la llevó a la fama. Antes de eso, había actuado en varias películas británicas y protagonizado la obra de Broadway Gigi en 1951.
Después de alcanzar la fama, comenzó a trabajar sin parar y a expandir su filmografía con películas inolvidables como Desayuno con diamantes (1961) y Sola en la oscuridad (1967).
También incursionó en papeles más dramáticos en películas como Historia de una monja (1959) y regresó a la comedia en Sabrina (1954). Por su actuación en estas cuatro películas, fue nominada al premio Oscar a la Mejor Actriz. En 1958, recibió el premio a la Mejor Actriz en el Festival de San Sebastián y el premio Bafta Británico en la misma categoría por su actuación en Historia de una monja. Posteriormente, ganó este mismo premio por segunda vez por su papel en la película Charada (1963).
En 1954, Hepburn conoció a Mel Ferrer en Hollywood, quien era un actor destacado en ese momento. Se casaron el 25 de septiembre del mismo año y tuvieron un hijo llamado Sean el 17 de julio de 1960. Aunque su matrimonio duró más de diez años, se vio afectado por la pérdida de cinco embarazos y finalmente se divorciaron en noviembre de 1968. Audrey se casó nuevamente en enero de 1969, esta vez con un psiquiatra italiano llamado Andrea Dotti, con quien tuvo un hijo llamado Luca Andrea el 8 de febrero de 1970. Sin embargo, su segundo matrimonio también enfrentó problemas debido a infidelidades, lo que finalmente llevó a un divorcio en 1976.
Después de retirarse del cine por algunos años para cuidar de sus dos hijos, Audrey Regresó para protagonizar la película Robin y Marian (1976), dirigida por Richard Lester.
Aunque decidió alejarse del cine, todavía frecuentaba los sets de filmación y fue allí donde conoció a su último amor, el actor holandés Bob Wolders. Según Audrey, él fue su único amor verdadero y declaró a la prensa: «Él me hizo vivir de nuevo, darme cuenta de que no todo se había terminado para mí». Continuó participando en nuevas películas, como Lazos de Sangre (1979), rodada en Nueva York y protagonizada por Omar Sharif y Ben Gazzara.
Su personalidad y el estilo de dejaron una huella imborrable en la moda de la época. Su sonrisa era el modelo a seguir para las chicas de esa época, al igual que su figura esbelta y delicada. Su singular aura y magnetismo trascendieron las tendencias de la moda.
Su última actuación fue en la película Always (1989), dirigida por Steven Spielberg, donde su mera presencia hace referencia a la frase inscrita en su funeral: «Si en el cielo existen los ángeles, estoy convencido de que deben tener los ojos, las manos, el rostro y la voz de Audrey Hepburn». En 1993, unos meses después de su fallecimiento, la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood le otorgó un Premio Humanitario Jean Hersholt por su labor como embajadora permanente de UNICEF.
Fue una actriz icónica que protagonizó varias películas importantes a lo largo de su carrera. Algunas de las películas más destacadas de Audrey Hepburn incluyen:
«Desayuno en Tiffany’s» (1961) (Breakfast at Tiffany’s) – Dirigida por Blake Edwards, esta película de 1961 es una de las más famosas de Hepburn, en la que interpreta a la icónica Holly Golightly.
La película está basada en la novela homónima de Truman Capote y es considerada un clásico del cine.
La trama sigue a Holly Golightly, una joven neoyorquina excéntrica y enigmática que busca un marido rico mientras disfruta de la vida nocturna de la ciudad. Su vida da un giro cuando conoce a un escritor llamado Paul Varjak, interpretado por George Peppard.
«Desayuno en Tiffany’s» es conocida por su icónica escena en la que Holly Golightly desayuna frente a la joyería Tiffany’s en la Quinta Avenida de Nueva York.
Música Henry Mancini
Género Romance. Drama. Comedia | Comedia romántica
Grupos Adaptaciones de Truman Capote
Sinopsis
Holly Golightly es una bella joven neoyorquina que, aparentemente, lleva una vida fácil y alegre. Tiene un comportamiento bastante extravagante, por ejemplo, desayunar contemplando el escaparate de la lujosa joyería Tiffanys. Un día se muda a su mismo edificio Paul Varjak, un escritor que, mientras espera un éxito que nunca llega, vive a costa de una mujer madura. (FILMAFFINITY)
Posición en rankings FA
77 Mejores películas románticas de la historia del cine
91 Mejores películas de los años 60
92 Mejores películas de comedia
Premios
1961: 2 Oscars: Mejor canción, banda sonora película no musical. 5 nominaciones
1961: Globos de Oro: Nominada mejor película – Comedia y actriz (Hepburn)
1961: Sindicato de Directores (DGA): Nominada a mejor director
1961: Sindicato de Guionistas (WGA): Mejor guion comedia
1961: Premios David di Donatello: Mejor actriz extranjera (Audrey Hepburn)
Críticas
«Una historia de amor inusual, glamurosa, sofisticada, y con un decidido toque estrafalario.»
James Powers: The Hollywood Reporter
«Sigue luciendo un muy buen aspecto, y se necesita tener un corazón de piedra para no adorar al gato (…) Puntuación: ★★★ (sobre 5)»
Peter Bradshaw: The Guardian
«Tan alocada y encantadora como siempre, con el suficiente encanto para olvidar todos sus fallos (…) Puntuación: ★★★ (sobre 5)»
Cath Clarke: Time Out
«Emerge como un entretenimiento poco convencional pero muy dinámico que dará mucho de qué hablar»
Larry Tubelle: Variety
En raras ocasiones nos encontramos con una película que reúna tantos elementos excepcionales como esta. Es considerada una de las grandes de todos los tiempos y una de las mejores en su género, la comedia romántica.
Esta obra maestra se basa en cuatro pilares fundamentales: Audrey Hepburn, Blake Edwards, Henry Mancini y Truman Capote. Hace mucho tiempo que no tengo la oportunidad de ver esta película y siento un gran deseo de hacerlo mientras escribo estas líneas.
¿Existe otra película que transmita tanta elegancia? Edwards, posiblemente solo comparable a sus trabajos en «VICTOR O VICTORIA» y «DÍAS DE VINO Y ROSAS», muestra su máximo esplendor. Además, Mancini crea otra excelente partitura que ya forma parte de nuestra Banda Sonora Original colectiva, contribuyendo al séptimo arte con la icónica canción «MOONRIVER», que es tarareada, silbada o susurrada por Hepburn, un verdadero deleite para los oídos. Es una de las mejores canciones que se han escuchado en una pantalla, y debemos agradecer a Audrey por haber amenazado con retirarse del proyecto junto con la canción, la cual no era del agrado de algún productor poco sofisticado.
Moon river (subtitulada) – Audrey Hepburn en «Breakfast at Tiffany’s»
Es cierto que para algunas personas, especialmente aquellas que solían jugar con muñecas y soñaban con encontrar a su compañero ideal, la estética elegante que rodea a la protagonista y la forma en que trata a los hombres notables pueden hacer que pasen por alto el hecho de que ella es una persona inmadura e inestable que vive a expensas de estos hombres. Sin embargo, la trama, entre comillas, es predecible en exceso, más de lo que suelen ser las películas románticas, y los diálogos son patéticos y vacíos. Es importante mencionar las escenas que revelan el pasado de la protagonista.
Por último, no podemos dejar de mencionar a George Peppard (Coronel John «Aníbal» Smith para los amigos), quien interpreta su papel con elegancia y un peinado impecable. Él se enamora de la delgada Audrey Hepburn, una combinación conmovedora. En resumen, esta película es una joya del cine, con una combinación perfecta de talento en la dirección, actuación, música y guion. Aunque algunos aspectos de la trama y los diálogos pueden no gustar a todos, no se puede negar la elegancia y el encanto que emanan de esta obra maestra.
«Vacaciones en Roma» (Roman Holiday en inglés) es una película de comedia romántica estadounidense de 1953 dirigida por William Wyler y protagonizada por Audrey Hepburn y Gregory Peck. La película cuenta la historia de una princesa moderna (Hepburn) que visita Roma de forma oficial y se rebela contra sus obligaciones reales. Allí conoce a un periodista estadounidense (Peck) que está buscando una exclusiva y finge no saber quién es la princesa. Los dos se enamoran en una aventura romana y romántica.
Vacaciones en Roma es considerada una de las mejores películas de la historia del cine y una de las historias de amor más taquilleras.
La película ‘Roman Holiday’ se filmó en Italia, concretamente en los estudios Cinecittà y en los alrededores de Roma, durante la época dorada de ‘Hollywood en el Tíber’. Fue presentada en el 14º Festival Internacional de Cine de Venecia como parte de la selección oficial.
En 1999, la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos la seleccionó para su conservación en el National Film Registry por su valor cultural, histórico y estético.
Además, ha sido reconocida en el AFI’s 10 Top 10 como la cuarta mejor película de ‘Comedia romántica’ y también en la lista de las cien mejores historias de amor del cine estadounidense.
Música Georges Auric
Comedia Romance | Comedia romántica. Periodismo
Sinopsis
Durante una visita a Roma, Ana, la joven princesa de un pequeño país centroeuropeo, trata de eludir el protocolo y las obligaciones que implica, escapándose de palacio para visitar la ciudad de incógnito. Así conoce a Joe, un periodista americano que busca una exclusiva y finge desconocer la identidad de la princesa. La pareja vivirá unas jornadas inolvidables recorriendo la ciudad. (FILMAFFINITY)
Posición en rankings FA
36 Mejores películas románticas de la historia del cine
52 Mejores películas de comedia
68 Mejores películas de los años 50
Premios
1953: 3 Oscars: Mejor actriz (Hepburn), argumento original y vestuario. 10 nominaciones
1953: Globos de Oro: Mejor actriz drama (Audrey Hepburn)
1953: Premios BAFTA: Mejor actriz británica (Audrey Hepburn). 4 nominaciones
1953: Círculo de Críticos de Nueva York: Mejor actriz (Hepburn). 2 nominaciones
1953: Sindicato de Directores (DGA): Nominada a mejor director
1953: Sindicato de Guionistas (WGA): Mejor guion comedia
Críticas
Todo un clásico que relata la encantadora aventura romana y romántica entre una princesa en busca de la normalidad y un periodista norteamericano a la caza de una exclusiva. Hepburn y Peck, irresistibles los dos, se enamoran en un cuento delicioso que ya es leyenda del cine.
FilmAffinity
«Una historia natural, tierna y entretenida (…) Ellos viven unas vacaciones cortas, pero totalmente placenteras.»
A.H. Weiler: The New York Times
«Wyler dispone todos los elementos con cariño y precisión, pero esta comedia romántica no acaba de funcionar»
Dave Kehr: Chicago Reader
«[Wyler] provoca carcajadas con un ritmo que nunca decae, pone alma al humor (…) y genera algunas escenas tiernas y emotivas sacando el máximo partido al inteligente guion y al reparto.»
Variety
«Los momentos individuales de la película de Wyler todavía te dejan sin aliento (…) Puntuación: ★★★★ (sobre 5)»
Robbie Collin: Telegraph
«La novata Audrey Hepburn le da al sinsentido romántico antiguo y popular un realismo que rara vez ha tenido antes.»
Time
«Un clásico exuberante y atemporal, con el sentido ingenuo de la diversión y la encantadora actuación de Hepburn equiparable al carismático americano cosmopolita de Peck (…) Puntuación: ★★★★ (sobre 5)»
David Parkinson: Empire
La cinta, que resonó profundamente en Argentina, relata el periplo de Anya, una princesa que ansía la sencillez y la cotidianidad, huyendo de las restricciones de su estatus aristocrático. Su encuentro casual con un periodista despierta una cadena de sucesos que desembocan en un amor inesperado. A lo largo de su odisea, la película indaga en las cargas y las expectativas que pesan sobre los jóvenes nobles, poniéndolos en contraste con la vida de las personas comunes.
El filme se erige como una parábola moderna que medita sobre la juventud y el deber, impartiendo enseñanzas acerca de la relevancia de vivir con genuinidad y conciencia de las obligaciones propias. Asimismo, es un homenaje a Roma, capturando su alma a través de sus emblemáticos monumentos.
Audrey Hepburn destaca en su rol, proporcionando una combinación de ternura y resiliencia al personaje de Anya. La escena culminante, conmovedora y llena de significado, subraya la dualidad entre el regocijo y la nostalgia que es intrínseca a la existencia. En su esencia, la película es un tributo a la princesa del séptimo arte, festejando su herencia y la influencia perdurable de su trabajo.
“Sabrina” es un clásico del cine estadounidense de 1954, dirigido por Billy Wilder, con las estelares actuaciones de Audrey Hepburn, Humphrey Bogart y William Holden. La trama se centra en Sabrina Fairchild, papel de Audrey Hepburn, una joven que se enamora perdidamente de David Larrabee, el playboy encarnado por William Holden. Después de un desengaño amoroso, Sabrina contempla un acto desesperado, pero es rescatada por Linus, el hermano responsable de David, interpretado por Humphrey Bogart.
Tras un período en París, Sabrina vuelve hechizante y renovada, logrando capturar la atención de David. Linus, temeroso de que la relación amenace una importante fusión de negocios, intenta distraer a Sabrina con sus encantos. No obstante, en un giro inesperado, Linus cae rendido ante su encanto y, al confesar su estrategia, la desilusiona. Contra todo pronóstico, Linus finalmente cede ante sus emociones y opta por el amor sobre la lógica empresarial.
Género Romance. Comedia | Comedia romántica. Comedia sofisticada
Grupos Adaptaciones de Samuel A. Taylor
Sinopsis
La joven Sabrina, hija del chofer británico de los poderosos Larrabee, está enamorada del hijo menor de la familia, que coquetea con ella por puro entretenimiento. El padre la envía a Paris, de donde vuelve convertida en una mujer elegante y seductora que trastorna a los dos hermanos Larrabee, tanto al frívolo David como al hermético y adusto Linus. (FILMAFFINITY)
Posición en rankings FA
134 Mejores películas románticas de la historia del cine
146 Mejores películas de comedia
Premios
1954: Oscar: mejor Vestuario B/N. 6 nominaciones incl. director y actriz (Hepburn)
1954: Globos de Oro: Mejor guion
1954: Premios BAFTA: Nominada a mejor actriz británica (Audrey Hepburn)
1954: Círculo de Críticos de Nueva York: Nominada a mejor actriz (Audrey Hepburn)
1954: Sindicato de Directores (DGA): Nominada a mejor director
1954: Sindicato de Guionistas (WGA): Mejor guion comedia
Críticas
El gran Billy Wilder, que venía de rodar «Traidor en el infierno», «El gran carnaval» y «El crepúsculo de los dioses», entrega su primera (de muchas) comedia magistral, una de las más encantadoras y elegantes historias románticas de la historia del cine.
FilmAffinity
«Es, en nuestra modesta opinión, la comedia romántica más maravillosa que ha aparecido en años.»
Bosley Crowther: The New York Times
«Un cuento de hadas olvidable e inocente a la antigua usanza que no tiene toda la química sexual que le hace falta.»
Ian Nathan: Empir
“Sabrina” emerge como un tesoro inmortal de la comedia romántica, una perla en el repertorio del inigualable Billy Wilder. Esta película se distingue de las típicas comedias románticas por su narrativa elegante y emotiva, en la que resplandecen los personajes interpretados por Bogart y Audrey Hepburn, convirtiéndose en una pareja emblemática del séptimo arte.
La historia sigue a Sabrina, la hija del chófer de una familia adinerada, quien oculta un amor secreto por David Larrabee, el hijo menor de la familia, personificado por William Holden. Ignorada por él, Sabrina se transforma durante su estancia en París y regresa encantadora, capturando finalmente la atención de David. Sin embargo, el destino la conduce a una relación más estrecha con Linus, el hermano mayor y hombre de negocios, interpretado por Humphrey Bogart.
A pesar de su fachada de cuento de hadas con un desenlace feliz y previsible, “Sabrina” es rica en un guion astuto y escenas de comedia sofisticada que la hacen única. La película celebra el triunfo del amor sobre el materialismo y las normas sociales, y se destaca por las actuaciones magistrales de su elenco, en especial la encantadora e irresistible Audrey Hepburn y un carismático William Holden.
En el cine, las películas que llevan nombres de mujer como “Rebeca” y “Laura” han tenido éxito, y “Sabrina” no es una excepción, afianzándose como una obra maestra atemporal.